La procuradora adjunta, Claudia Maselli y la defensora de la Salud, Zulma Calderón, llevaron a cabo una nueva supervisión al Hospital San Vicente, tomando en cuenta que el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) ofreció fortalecer con 100 camas más a dicho hospital ante la crisis sanitaria por COVID-19 que enfrenta el país. Desde 2020 el hospital contaba con 25 camas para la atención de dichos pacientes; sin embargo, actualmente se pretende hacer dicha ampliación por medio de carpas, las cuales no cuentan con las condiciones necesarias.
Hallazgos:
- En este momento siguen habilitadas solamente 25 camas que fueron instaladas en 2020.
- A partir del 1 de septiembre se contrataron a 14 personas (auxiliares de enfermería) y 5 médicos. Lamentablemente renunciaron 4 personas por lo que solamente se cuenta con 10 auxiliares de enfermería en este momento, como parte del fortalecimiento.
- Los planes actuales de implementación del área COVID-19 no han sido compartidos con el cuerpo médico del hospital, por lo que la instalación de la carpa para la atención de pacientes COVID-19 les tomó por sorpresa.
- A pesar que el personal médico ha insistido en que la capacidad del hospital está establecida únicamente para la atención de pacientes COVID-19 leves y moderados, se continúan recibiendo pacientes graves, con complicaciones y co-morbilidades.
- No se cuenta con atención de diálisis y hemodiálisis y se han recibido pacientes renales crónicos COVID-19 positivos.
- Únicamente la Dirección Ejecutiva decide el traslado de pacientes a otros hospitales con mayor capacidad resolutiva, sin considerar el criterio de los médicos tratantes.
- Del uno de enero al 16 de septiembre del presente año, se han atendido 167 pacientes COVID-19 y han fallecido 21; debido a esta situación, en las últimas dos semanas, la mortalidad ha aumentado, falleciendo 7 pacientes.
- La ampliación de las 75 camas se pretende cubrir con el personal médico con que cuenta el hospital. Se ha informado que deben rotar por áreas COVID-19 durante dos horas diarias y luego seguir atendiendo los otros servicios, esto a pesar que algunos están asignados a la atención de pacientes con tuberculosis aún positivos o multidrogoresistentes.
- La asignación del personal médico a los servicios COVID-19 limita la atención al resto de áreas especializadas, tal es el caso del área de cirugía de tórax, siendo este de los pocos hospitales en el país que proporciona este servicio de la red del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social.
- De forma verbal se ha informado al personal médico que solamente quedarán disponibles 34 camas para los pacientes con tuberculosis.
- Se evidenció el desabastecimiento de Remdesivir y Tocilizumab.
- No tienen kits de tratamiento para pacientes con COVID-19.
- Por más de dos semanas se registró el desabastecimiento total de pruebas diagnósticas de COVID-19.
- La Dirección Ejecutiva no atendió la visita ya que informaron estaban en una reunión con líderes sindicales.
- En relación con los hospitales de campaña (carpas) para la ampliación de áreas COVID-19, al momento de la verificación se encontró:
- 1.Corresponden básicamente a carpas instaladas a un costado del área COVID-19 con la que ya contaba el hospital.
- 2.Cada carpa tiene capacidad para 20 camillas, no se puede guardar el distanciamiento de 1.5 metros entre camillas.
- 3.El techo es bajo, las carpas son oscuras, sin ventilación natural y en extremo calurosas, por lo que dependerán, de forma exclusiva, que funcione el aire acondicionado.
- 4.Cuentan con aire acondicionado, pero sin los lineamientos técnicos establecidos para la atención de pacientes COVID-19 (filtros HEPA).
- 5.No cuentan con tomas de oxígeno.
- 6.No cuentan con baño y lavamanos.
- 7.Existe riesgo de inundación al momento de llover.
- 8.Las carpas colindan con el centro de manejo de desechos.
Guatemala, 20 de septiembre de 2021.